Para cambiar el cuerpo y dejar de tener sobrepeso, primero se debe cambiar la mente.
Cuando estamos frente a la báscula podemos llegar a pensar que nuestro cuerpo debe cambiar y que debemos entrar a la web y buscar cómo bajar de peso rápido, pero hay un paso previo y tiene que ver con la mentalidad.
No hay proyecto que tenga posibilidades de éxito si no estamos convencidos de que lo lograremos. Esto aplica a todos los niveles y es una cuestión de conciencia.
Adelgazar rápido es como tratar de emprender un camino sin tener idea a dónde vamos. No podemos simplemente empezar a dar pasos, antes debemos conocer hacia dónde vamos y cómo llegaremos a ello. Esto es mucho más difícil a medida que tenemos más sobrepeso.
A eso me refiero a tener claridad en los objetivos. Si deseas alcanzar tus metas en materia de salud, necesitas una estrategia de largo alcance en tu salud y nutrición.
El camino para olvidarte de la obesidad no será fácil y lo sabes, pero una vez que llevas un tramo, verás que el resto es cuestión de inercia. Solo es cuestión de seguirte esforzando.
A continuación te dejo 3 pasos para cambiar tu mentalidad.
Paso 1: Busca conductas, no resultados
Si piensas en que quieres tener un cuerpo para concursar está bien, pero si piensas en que dejarás de comer postre todos los días tendrás un cambio de conducta que más allá de lo ideal, sí se traducirá en resultados.
No hay nada malo en querer lucir bien, lo único malo es solo desearlo y no hacer nada con tu alimentación para conseguirlo.
Cambiar la conducta dará un fruto, mientras que simplemente “desear” quizás solo genere frustración. Este es una misión de constancia y regularidad más que de anhelos y sueños.
Paso 2: Concéntrate en pequeños objetivos
Los cambios no llegan solos y siempre habrá resistencia a ellos. Cuando éstos son impuestos su reacción natural será de oposición.
Cuando estás en un plan de pérdida de peso es normal que sientas que al principio fracasas y por eso los médicos aconsejen ir paso a paso y repetir una y otra vez lo que nos funciona
Cuando dominas un paso, encuentras confianza para seguir en busca de más terreno.
Paso 3: Busca rendimiento
Si vas a emprender un largo viaje es mejor elegir un vehículo que nos dé rendimiento en el combustible. De poco nos servirá uno veloz o capaz de llevar una gran carga si la meta es llegar lejos. Así funciona con los objetivos. Si ya comprobaste que el azúcar te afecta particularmente debido a la diabetes y eres débil con los postres, entonces lo mejor será simplemente alejarte de ellos y decírselo a tu consultor para que entre ambos tomen las medidas necesarias.
En este camino no estás solo pero sí una gran parte solo depende de ti y de la claridad mental que tengas para saber que es momento de actuar a favor de tu cuerpo.
Una vez que tengas los objetivos, verás que la meta se ve más cerca.