Seguramente has escuchado en esas platicas con amigos, o afuera del gimnasio de cómo el tomar agua fría quema calorías. Hay opiniones que apoyan esta versión. Hay otras que la rechazan y un infinito número de razones “científicas” que escuchas, pero que no tienen fundamento o que suenan muy irreales.
Comencemos por identificar cuándo nació este rumor. En el año 2003 un estudio en Alemania monitoreo a 14 personas bebiendo agua fría y encontraron que pueden aumentar hasta un 30% su consumo de calorías por lo menos durante una hora. Llegaron a laconclusión de que si tomas 2 litros de agua fría, podrías quemar hasta 100 calorías extra al día.
La difusión de este estudio no se hizo esperar y llego a oídos de muchas personas. Sobre todo a los de otros investigadores que habían estado estudiando el mismo tema y la termogénesis en la comida (cuantas calorías requiere para metabolizar la comida). Esto hizo que atacarán al estudio realizado en 2003. Se dieron cuenta de que estadísticamente si existía cierto efecto, no tan significante, pero si un efecto evidente en la quema de calorías.
Al beber un vaso con agua fría se estaría quemando aproximadamente un total de 4 a 7 calorías por vaso, lo que sería un equivalente a un chocolate M&M´s. Es casi nada, pero si se puede justificar la teoría de que el agua fría ayuda a quemar calorías.
Beber suficiente agua es necesario para el cuerpo, para su correcto funcionamiento. Pero si lo que quieres es bajar de peso, la hidratación será súper importante. Beber agua estará garantizando que tu metabolismo está en movimiento en su mayor desempeño. Otro factor a considerar es que el agua fría resulta más agradable al paladar. Por eso es que se prefiere más que el agua a temperatura ambiente.
También, beber agua fría dará un pequeño aumento de energía. Por eso es recomendable tener a la mano durante las sesiones de ejercicio en el gimnasio.
Sin embargo, si bebes agua antes de comer, sin importar la temperatura en la que se encuentre, te sentirás satisfecho más rápido y no comerás grandes cantidades. También debes evitar beber refrescos con gas u otras bebidas azucaradas.
Beber agua debe ser un hábito que nadie debe dejar de hacer. Más que por perder peso, debe tomarse por una cuestión de salud. Un ser humano está constituido en su mayoría por agua y es este líquido el que nos da la vitalidad que necesitamos para seguir adelante todos los días. ¿Has estado mucho tiempo sin beber agua? Analiza como te sientes antes y después de beber tan sólo un vaso. Identifica como tu cuerpo se llena de energía. Mantente hidratado durante ejercicios o actividades en las cuales pierdas líquidos por medio del sudor.