Cuando llegan las vacaciones muchas personas se olvidan de las dietas y la alimentación saludable. La ganancia de 3 a 5 kilogramos son comunes en épocas festivas o vacacionales, por lo tanto el seguimiento de algunas recomendaciones le ayudarán a que mantenga sus buenos hábitos y no aumente de peso.
Prefiera los alimentos bajos en grasas. El jamón o pechuga de pavo, por ejemplo, o las papas cocidas (sin mantequillas) son buena opción.
No descuide su rutina de ejercicios. Una de las maneras más eficaces para mantener el peso durante vacaciones es quemando el exceso de calorías acumuladas. Planee un paseo para después de la comida principal, evite utilizar el vehículo para desplazamientos cortos, incluso aproveche la caminata por plazas comerciales como parte de su ejercicio.
Coma sin culpa. Pero coma bien: revise las opciones disponibles para mantener una alimentación balanceada, sin dejar fuera verduras, frutas, aderezos bajos en grasa, y rebanadas de carnes magras. Recuerde que pequeños refrigerios evitarán el antojo de darse atracones a la hora de comer.
Evite el alcohol. Beber puede paralizar su fuerza de voluntad, y añadir exceso de calorías a su dieta. Prefiera por las noches agua limonada o algún coctel bajo en azúcar.
Sea flexible. Un par de comidas fuera de lo establecido no van a arruinar su dieta. Pero sí esmérese por compensar con ejercicio y reducción de calorías volviendo de vacaciones le ayudará a recuperar cualquier exceso en el que haya caído.