Sabías que una de cada diez mujeres en edad reproductiva tienen síndrome de ovario poliquístico. El cual no sólo causa un periodo irregular y problemas de fertilidad, sino que también puede desarrollar diabetes. Este padecimiento provoca la formación de pequeños quistes inofensivos en los ovarios y reduce el número de óvulos que se producen. Se cree que este síndrome está causado por los altos niveles de la hormona insulina que absorbe azúcar en la sangre.
Además, se piensa que los altos niveles de insulina producen altos niveles de testosterona (hormona masculina) en los ovarios. Aunque aún no se sabe el por qué. Esto puede conducir a un crecimiento excesivo de vello. Pero más importante aún, puede aumentar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Las mujeres con el síndrome de ovario poliquístico tienen mayor riesgo de sufrir enfermedades del corazón debido a los altos niveles de insulina.
Problemas de estómago y dolor de espalda
La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es un grupo de afecciones inflamatorias del tracto digestivo que pueden provocar dolor de espalda. La EII causa inflamación y daño a la mucosa intestinal dando lugar a fugas de sustancias tóxicas desde el intestino y provocando hinchazón en las articulaciones .
Según el Dr. Andrew Poullis, gastroenterólogo consultor en el Hospital St. George de Londres, una cuarta parte de los pacientes con EII sufren artritis. Por ejemplo, un dolor de espalda puede deberse a una pancreatitis. Que se produce cuando el páncreas (ubicado detrás del estómago y encargado de producir enzimas digestivas) se inflama.
Hay una compleja red de nervios cerca del páncreas. Por lo que la pancreatitis puede estimular y causar dolor de espalda”. Dice Giles Bond-Smith, cirujano en el Hospital Royal London.
El reflujo, donde fugas de ácido estomacal van al esófago causando dolor en el pecho, también puede provocar dolor de espalda. Aunque los médicos desconocen la razón.
Si tienes algún malestar y vas al médico, no olvides mencionar cualquier condición aunque creas que no tiene ninguna relación con tu padecimiento. Más vale prevenir, ¿no crees?
Migrañas e infartos
Las migrañas, especialmente aquellas donde se ven luces intermitentes (aura), aumentan el riesgo de un infarto cerebral en 21%. Un derrame cerebral ocurre cuando no llega sangre suficiente a una parte del cerebro debido a la obstrucción generada por un coágulo (conocido como un accidente cerebrovascular isquémico). O cuando hay una hemorragia interna (accidente cerebrovascular hemorrágico).
En un análisis realizado por investigadores islandeses, donde se dio seguimiento a 19,000 mujeres y hombres de más de 26 años, se concluyó que las personas con migraña “aura” tenían un mayor riesgo de morir por enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular. En cambio, los que tenían migraña “sin aura” no tenían mayor riesgo.
Otro estudio, donde participaron cerca de 28,000 mujeres estadounidenses y que se llevo acabo durante 13 años, encontró que aquellas personas que padecían migraña “con aura” tenían un mayor riesgo de accidente cerebrovascular hemorrágico.
En las mujeres menores de 40 años la migraña con aura siempre ha sido considerada como un factor de riesgo para el infarto cerebral […]Sin embargo, recientemente se ha comprobado que todas las personas con migraña “aura” tienen un mayor riesgo de accidente cerebrovascular. El mecanismo exacto no se entiende completamente aún. Pero es probable que sea influenciado por factores relacionados con la coagulación de la sangre”, indicó el Dr. Andy Dowson , director del servicio de dolor de cabeza en el Hospital King’s College de Londres.