El problema de Alzheimer conduce de cierta manera a la pérdida de las funciones relacionadas con la alimentación; los pacientes en ocasiones olvidan comer y es importante mantener una buena nutrición para evitar más deterioro en el paciente.
El acceso de la comida vía oral en la mayoría de lo casos de Alzheimer es viable, en otras circunstancias más graves es necesaria la adecuación a vía enteral debido a que la deglución en el paciente no es posible o bien el control de esfínter esofágico está dañado.
Cuando tenemos un paciente que se puede alimentar vía oral es necesario aportar en poca cantidad de comida suficiente energía y los nutrimentos adecuados.
Alimentos nutritivos con gran aporte energético:
- Se pueden usar licuados hechos de frutas como: plátano, leche de coco o almendras, miel de abeja, chía, vainilla líquida o chocolate en polvo.
- Comer nueces y semillas ricas en grasas mono y poliinsaturadas que son buena fuente de energía.
- Dar al paciente bebidas líquidas ricas en hidratos de carbono como: leches fortificadas, ENSURE, leches con chocolate, etc.
Además de brindar un adecuado aporte energético es de gran importancia dar los alimentos en una presentación correcta; es decir que el paciente pueda digerirlos y masticarlos con mayor facilidad. Preparando alimentos picados, en purés y machacados puede ser una opción adecuada para éstos pacientes.