Es un hecho que comer demasiadas hamburguesas produce obesidad y aumenta las índices de colesterol en las personas.
Y sin duda, algunas comidas deberían de venir con una advertencia tal y como lo hacen con las cajetillas de cigarros.
Decimos esto porque según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la alimentación de las personas ha cambiado para mal en los últimos años.
Esto es alarmante si tomamos en cuenta que una mala alimentación no sólo produce obesidad, también diabetes y problemas cardiovasculares.
Incluso, la misma OMS ha previsto que si no se hace nada para revertir la mala alimentación, las personas que nacieron después del 2000 tendrán una menor calidad de vida.
Manuel Serrano Ríos, quien es catedrático de la Universidad Complutense y miembro de miembro de la Real academia de medicina, mencionó que una mala alimentación es más peligrosa que el tabaco, ya que su impacto negativo es mayor en muchos sistemas del cuerpo.
La obesidad, una pandemia mundial
La obesidad ha sido la primera enfermedad no infecciosa de que la OMS la declaró como pandemia, no obstante, esta no es la única razón de por qué urge que volvamos a una dieta saludable.
Por ejemplo, una de las consecuencias más comunes en una persona con mala alimentación es el estreñimiento, de las cuales se pueden derivar las hemorroides o fisuras anales, por lo que puede terminar en anemia por pérdidas de sangre.
Y no sólo eso, hay una gran cantidad de problemas ligados a una mala alimentación como problemas en la piel y cabello por no hidratarse de manera correcta y sólo consumir refrescos en lugar de un vaso de agua.
Mayor calidad de vida, menor calidad en la alimentación
Además a todo esto, hay que agregarle los alimentos procesados aumentan la posibilidad de que las personas contraigan alergias en algún momento de su vida si no tienen una dieta saludable.
Incluso, algunos expertos en el tema de nutrición ven esto como una paradoja, pues la calidad de vida y la facilidad de conseguir alimentos ha conseguido empeorar la calidad de la alimentación de demasiadas personas.
Un dato muy poco alentador es que los jóvenes consumen demasiadas calorías por lo que cada vez se cuidan menos.
No obstante, los expertos en nutrición piensan que las dietas no están peleadas con la gastronomía, se puede cuidar la presentación de los alimentos, pero al mismo tiempo se puede comer saludable.
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