La artritis reumatoide es una enfermedad que muchos de mis pacientes padecen.
En general, los dolores son agudos y las molestias en las articulaciones afectan su movilidad.
Sé que tus pacientes también pasan por esto, pero no sabes cómo mejorar sus síntomas.
Sin embargo, hay un alimento que puede servirles para aliviar sus síntomas y mejorar sus sensaciones.
Te hablo del salmón.
Esta especie de pescado es una rica fuente de omega-3.
En general, los ácidos grasos de omega-3 ayudan a reducir la inflamación, uno de los síntomas más comunes que presentan los pacientes con artritis reumatoide en las articulaciones.
Por lo tanto, también el dolor se reduce.
Es importante saber manejarlo después de comprarlo para poder aprovechar todas sus bondades.
Para almacenarlo y aún aprovechar todas sus propiedades, es importante mantenerlo en refrigeración por un máximo de 2 días o congelado hasta por 3 meses. Para descongelarlo, la mejor opción es dejarlo dentro del refrigerador durante la noche.
Tus pacientes pueden prepararlo como gusten: a la parrilla, asado, horneado, ahumado, salteado, o como prefieran
Siempre es mejor buscar los productos frescos y en su temporada.
En el caso del salmón, los que se pescan directamente en la naturaleza tienen menos grasa saturada y mayor cantidad de omega-3 que las producidas en cautiverio.
Incluye el salmón en la dieta de tus pacientes y verás que harás una gran diferencia en sus síntomas de artritis reumatoide.
Ellos te lo agradecerán.