Te contaré una pequeña historia.
La mamá de una de mis mejores amigas siempre fue una mujer lúcida y súper inteligente.
Sin embargo, hace unos 6 años empezó a fallarle la memoria y de repente perdía el hilo de lo que decía.
Mi amiga y su familia pensaron que era normal y solo parte de envejecer.
Dos años después le diagnosticaron Alzheimer.
Desde entonces, se ha perdido tres veces mientras salía a caminar o a comprar algo.
La familia de mi amiga decidió que su mamá pasara todos los días con alguno de sus hijos.
Hace unos días, encontré un artículo que hablaba de la mala alimentación como una causa de Alzheimer.
Resulta que esta enfermedad ya es considerada una epidemia que no tiene cura; sin embargo, es evitable y se demostró que es una enfermedad metabólica. Incluso algunos científicos hasta la llaman “diabetes tipo 3”.
Investigué un poco más y descubrí que hay tres factores alimenticios principales que están relacionados con esta enfermedad.
Consumo de azúcar
Para los adictos al azúcar, el riesgo de padecer Alzheimer es tres veces mayor que para el resto de la población.
Salud intestinal
Se descubrió que las bacterias en el intestino tienen una estrecha relación con el Alzheimer. Mientras mayor sea la salud de la flora intestinal, menores serán las probabilidades de desarrollar Alzheimer.
Mala nutrición
Una sustancia principal para evitar el Alzheimer es el zinc, el cual debes consumir diario porque tu cuerpo lo desecha todos los días. El problema es el contenido de omega-6s en los aceites industriales, como el de canola, y que provoca la inflamación de tu cuerpo y cerebro.
No pude evitar pensar en la mamá de mi amiga y su familia.
Tampoco en los cientos de millones de personas que son afectadas por esta enfermedad.
Solo puedo decirte que mantener una dieta balanceada puede parecer difícil, pero siempre valdrá la pena para que estés bien, te sientas bien y puedas disfrutar más las cosas que realmente importan.
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¡Cuídate!
