Cuando digo comer un arcoiris, no me refiero a acabarnos una bolsa grande de ositos de goma. Me refiero a lo que aportan los colores para tu salud.
Las frutas y verduras de colores diferentes contienen componentes nutricionales que son esenciales para nuestra salud. Por eso es importante variar su consumo.
Mientras más colores comas, más beneficioso será para tu salud.
Los nutrientes en frutas y verduras rojas reducen el riesgo de cáncer de próstata, 
bajan la presión arterial, reducen el crecimiento tumoral y los niveles de colesterol LDL (o colesterol malo que desencadena enfermedades cardiovasculares) y ayudan a unir tejidos en casos de artritis.
Estos beneficios los podemos encontrar en tomates, sandía, cerezas y pomelo rojo, entre otros.
Los nutrientes en frutas y verduras naranjas y amarillas ayudan a reducir el 
riesgo de cáncer de próstata, el colesterol LDL y la presión arterial, promueven la formación de colágeno, mantienen articulaciones saludables y fortalecen los huesos.
Estos beneficios están en los mangos, naranjas, zanahorias, mandarinas, calabazas, melón, pomelo amarillo, piña, etc.
Los nutrientes en frutas y verduras verdes reducen los riesgos de cáncer, 
bajan la presión arterial y los niveles de colesterol LDL, normalizan el tiempo de digestión, apoyan la salud, son muy beneficiosos para tener una buena visión, pues protegen la retina, y aumentan la actividad del sistema inmunológico.
Estos aportes nutricionales están en lechugas, espinacas, acelgas, brócoli, kiwi, uva verde, etc.
Los nutrientes en las frutas y verduras azules y moradas mejoran la salud de la 
retina, disminuyen el colesterol LDL, aumentan la actividad del sistema inmunológico, promueven una digestión saludable, mejoran la absorción de calcio y otros minerales, combaten la inflamación, reducen el crecimiento tumoral y limitan la actividad de las células cancerosas.
Podemos obtener estos nutrientes de berenjenas, uvas negras y moradas, cebolla morada, mora, arándanos, etc.
Los nutrientes en las frutas y verduras blancas reducen el riesgo de cáncer de colon, 
mama y próstata, y equilibran los niveles hormonales, reduciendo el riesgo de cánceres relacionados con hormonas.
Estos pigmentos blancos se conocen como antoxantinas. Protegen a nuestro organismo del efecto dañino y cancerígeno de los radicales libres, tienen el efecto de retrasar el envejecimiento. También previenen la diabetes tipo 2 y reducen el colesterol.
El color blanco lo podemos encontrar en papas, ajos, puerros, plátanos, cebollas blancas y coliflor, entre otros.
¡Y todavía hay más!
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