Existen varios tipos de habilidades con las que todos nacemos, unos tenemos más desarrolladas algunas que otras no y viceversa. Lo bueno de las habilidades para ser buen coach es que puedes desarrollarlas y si aún no las desarrollas, tal vez te interese seguir leyendo.
Habilidades necesarias
1. COMUNICACIÓN
Tal vez estudiaste esta licenciatura o tal vez no, realmente no se trata de haber estudiado esa carrera universitaria en específico, se trata de tener la capacidad de hacer las preguntas correctas en el momento correcto, a su vez, también va a ser necesario que puedas responder a preguntas o a comentarios. La clave es siempre ser lo más claro y educado posible. Recuerda que no solo es lo que tengas que comunicar, sino cómo lo vas a comunicar, tu lenguaje corporal y la entonación y confianza con la que hables, te permitirá ser más escuchado.
2. CAPACIDAD DE ANÁLISIS Y SÍNTESIS
La capacidad de análisis también es una herramienta vital para saber discernir. Debes tener la capacidad para poder realizar relaciones entre varios temas y elementos que tu público que te va a proporcionar y que a su vez tú les estarás proporcionando. A su vez esto te ayudará a darle una directriz a los temas que vas a dar.
3. ASERTIVIDAD
Es probable que se pudiesen presentar situaciones de conflicto, la reacción que tu debes dar, es la de poder defender tu postura de manera educada al tiempo que estás proporcionando la información de manera serena y segura. Es tu deber mantenerte positivo y calmo en todo momento.
4. EMPATÍA
Esta va de la mano con el saberse comunicar. La empatía es la capacidad de poder entender a la gente. Demostrarles que has estado en sus zapatos o que entiendes lo que es estar ahí. A partir de la empatía se pueden formar relaciones o se puede interactuar de mejor manera con las personas, generando aceptación.
5. MADUREZ Y EQUILIBRIO
Un buen coach es una persona que no solo debe reflejar una actitud o una emoción, es una persona que está mental y emocionalmente preparada para la vida. Es una persona consciente de que tiene una responsabilidad con varios grupos de personas y es su deber actuar con la madurez suficiente ante cualquier situación, al mismo tiempo de tener el temple suficiente para mantenerse en equilibrio y paz ante todo.
6. TENACIDAD
Un buen coach sabe que el camino no siempre es fácil y es probable que se puedan presentar obstáculos. Sin embargo, sabe que rendirse no es una opción y podrás caer, pero nunca dejes de levantarte. Eso también se refleja.
7. LIDERAZGO
Para poder tener o desarrollar esta habilidad, no solo es necesario saber que hacer y dar las órdenes o mover a muchas personas. También es tener un sentido profundo de la responsabilidad. Uno no puede ser un buen líder si antes no ha sido un buen subordinado. Si no sabes el orden de las reglas, no puedes ponerlas y no puedes influenciar.
¿Ya identificaste tus puntos débiles? Si ya has visto cuales son tus deficiencias, es hora de trabajar en ellas y convertirlas en fortalezas.
El camino del buen coach suele ser de trabajo duro y constante, pero también de tener una visión muy positiva. Sigue adelante y permítete aprender de cada elemento de tu entorno.
Nunca te rindas y podrás enseñar y reflejar lo mismo.
