Un fundamento esencial en el marketing, es entender que antes de poder convencer a una audiencia, es indispensable llamar su atención.
Cuando puedes hacer esto de forma efectiva, atraparlos a través de los ojos, despiertas su curiosidad y seguramente seguirán el camino trazado hacia tu consultorio.
En la época en la que vivimos, la información visual es la que manda y por ello nos referimos a las imágenes.
Hay muchos estudios que dicen que alrededor del 93% de la comunicación es visual.
Para que te des una idea, el cerebro procesa imágenes más o menos 60,000 veces más rápido que un texto.
Hablando de marketing, al utilizar imágenes los mercadólogos obtienen resultados efectivos un 94% mayor al de sólo texto.
Ahora, aquí viene un dato interesante sobre las imágenes.
Uno de los aspectos interesantes a la hora de decidirte por el formato final que tendrá, recuerda que el tamaño sí importa.
Pero eso no es todo.
Una imagen de buen tamaño, mezclada con una buena distinción, diferenciación y localización, puede hacer la diferencia para tu consulta.
Entonces, retomando un poco. Si ya tienes tu imagen y ahora vas a decidir dónde colocarla piensa en:
- Tamaño – literalmente el tamaño de tu imagen en su formato final
- Distinción – Dentro de tu imagen, que la separa de otras imágenes de otros consultorios
- Diferenciación – Aquí no pienses tanto en el contenido de la imagen, aquí piensa más creativamente en que puedes modificar tal vez del formato final, de cómo interactuará con el espacio en donde la vallas a poner, etc.
- Localización – El lugar en el que elijas poner esta imagen, puede ser incuso el menos pensado y puede tener resultados increíbles.