La obesidad es una enfermedad crónica originada por muchas causas y con numerosas complicaciones. Se caracteriza por el exceso de grasa en el organismo y se presenta cuando el Índice de Masa Corporal en el adulto es mayor de 25 unidades.
La obesidad no solo perjudica a quien la padece a una larga lista de enfermedades. Como cardiopatías, hipertensión arterial y diabetes, si no también a psicopatías como depresión, ansiedad, menos posibilidades de acceso a los mejores trabajos, las mejores parejas y una mala relación familiar.
La obesidad se puede originar por diversas razones. Sin embargo, el ambiente en el que la persona se desenvuelve puede ser un factor de riesgo, las ideas, los conceptos y los recuerdos surgen del intercambio social.
La familia es la base de la sociedad. El primer contacto con el cual nos desarrollamos. Dentro de ella se adquieren los elementos necesarios para el desarrollo del ser humano y es de ahí donde se obtiene valores, creencias, hábitos y modos de comportamiento.
Conscuencias
Algunos efectos que experimentan las personas con baja autoestima en correlación con la obesidad son los siguientes:
1) Falta de confianza en uno mismo.
2) Visión distorsionada de ellos mismos y de los demás.
3) Presentan bajo rendimiento: al tener poca autoconfianza, dejan de esforzarse por realizar proyectos nuevos o llegar a sus metas, pero no se dan cuenta de que estos fracasos, no reflejan sus verdaderas capacidades y potencialidades.
4) Vida personal insatisfactoria.
Las experiencias positivas y gratificantes con las personas cercanas ayudan a incrementarla. Lo que contribuye a combatir la obesidad. Mientras que las relaciones conflictivas y experiencias negativas con la gente disminuyen el amor propio y hacen más difícil luchar contra el incremento de peso.
Dentro de cualquier tratamiento de la obesidad, la reducción de peso debe ser uno de los objetivos, pero no el único. Es imprescindible aprender a sustituir unos hábitos de alimentación insanos e inadecuados, por otros más adecuados.
Además, hay que trabajar aquellos factores psicológicos asociados a la obesidad como problemas de ansiedad, creencias, disfuncionales con respecto a nuestro cuerpo y apariencia, inseguridad y poca confianza en nosotros mismos, preocupaciones irracionales relacionados con la comida y el peso, etc.
La terapia psicológica
1-Evaluación. Es especialmente importante porque a partir de ella se va a construir toda la terapia. Consiste en recoger toda la información necesaria para comprender el problema del paciente, cómo se originó dicho problema y por qué sigue teniéndolo en la actualidad.
2-Exposición. Cuando el psicólogo tenga toda la información sobre tu caso, pasará a exponértelo de forma clara y directa. A partir de ahí, y desprendiéndose directamente de la hipótesis, te explicará en qué va a consistir tu terapia y qué técnicas específicas vas a aprender.
3-Terapia. El terapeuta te irá enseñando estrategias concretas para superar el problema. Es importante que entre sesión y sesión se practique lo aprendido. Pero teniendo presente que el que tiene que ponerlo en práctica eres tú.
4-Seguimiento. Cuando ya apliques con éxito lo aprendido en terapia en tus situaciones difíciles, y el problema empiece a desaparecer, entonces las sesiones se distanciarán hasta finalizar el tratamiento.