Es una pregunta con una respuesta sorprendente. Al menos en nuestra experiencia. Muchas veces cuando nos acercamos con algún experto de la salud, tratamos de ver que es lo que han intentado hacer en términos de marketing o de dar a conocer su marca y no es que nosotros nos dediquemos a ello, pero es algo muy interesante estos días.
Y la sorpresa viene cuando nos enteramos que la gran mayoría no han intentado nada nuevo.
Ninguna opción innovadora o arriesgada. Y es muy entendible, no es nuestro campo.
Pero la realidad es una, en este nuevo panorama, hay que arriesgarse.
Te dejamos 3 consejos para intentarlo sin sentir que te avientas al vacío.
- Hay que sentarse primero y reconocer y vencer la ambivalencia y otros obstáculos. El sector de salud es un entorno empresarial cada vez más competitivo. Permanecer neutral o inactivo no asegura crecimiento y lo que es peor, le cede oportunidades a la competencia.
- Hay que definir objetivos cuantificables, medibles y claros. Si no se tiene una hoja que marque la ruta de forma clara y los pasos definidos necesarios para alcanzar los objetivos, no hay crecimiento.
- Ayuda profesional experimentada. Una forma para reducir el riesgo es mediante el apoyo certificado de un tercero. No te niegues a recibir la ayuda que necesitas para marcar un curso claro para el crecimiento de tu negocio.
Siempre va a existir el riesgo en los negocios y el marketing. El problema es que mantenerse a línea, en una zona segura y no dar los pasos necesarios, es asegurar el estancamiento.
Son sólo aquellos que deciden avanzar y mostrar liderazgo los que alcanzan el éxito que todos quieren.
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