Es común que como doctores no estemos al pendiente de cuando nuestras rutinas y procedimientos se vuelven contra nosotros.
Recuerda que la razón por la que los pacientes dejan de ir a consulta o simplemente no llegan nuevos, es por mal servicio al cliente, no malas prácticas clínicas.
Con estos simples consejos, vamos a mejorar exactamente eso:
Fácil acceso al servicio – Que las citas sean accesibles a lo mucho dentro de 2 días y preferiblemente el mismo día.
Incluye sistemas de citas en línea – La calendarización por software o apps es algo muy sofisticado y tus pacientes podrán usarlo 24/7, además casi todos tienen la opción de recordarte de las citas.
Flexibiliza tus horas de oficina – Incluye consultas en la tarde o hasta en sábados. Así le sacaras ventaja a la competencia.
Mantén tu celular prendido – Incluso a la hora de comer, hay pacientes que te necesitan. Sé que tú también te mereces tu hora de comida, pero recuerda que la hora tradicional de comer, es también su hora de comida y probablemente el único tiempo en el que pueden marcarte.
Una gran primera impresión – Ya lo has escuchado antes, pero trata de encontrar algo en ti que te diferencie. Como ejemplo, uno de mis colegas es aficionado a Star Wars y es pediatra, tiene todo su consultorio lleno de acción y nunca está vacío.
Facilita la burocracia – Trata de tener la información adecuada, como con que seguros trabajas, así no tendrás que mandar a tu paciente a preguntar a otro lado y probablemente desanimarse en sacar una cita.
Algunas de estas ideas pueden sonar muy radicales y hasta desconsideradas para ti, pero en esencia, salirse de la zona de confort es la mejor estrategia para sacarle la delantera a la competencia.