Comenzar algo siempre en algunos momentos es la parte mas difícil y también la más importante para alcanzar un objetivo. Simplemente la fecha inicial se pospone y no por nada el primero de Enero siempre es la fecha ideal para comenzar nuevos retos y metas, pero como lo mencionamos, se sigue posponiendo la fecha para iniciar el nuevo reto. Es importante saber crear las metas nutricionales de pacientes para que cumplan sus objetivos.
Conoce a tu cliente
Seguramente cada uno de tus pacientes muestran diferentes tipos de actitudes y comportamientos, efectivamente cada uno lleva a cabo una vida muy particular, que lo hace distinto. Un tip muy importante y por el cual se debe dar comienzo al tratamiento del paciente es conocer cada aspecto de su vida; hábitos alimenticios, su estado físico, etc. Esto te ayudará a adaptar un plan de acuerdo a las necesidades de tu cliente.
Mantenerse en forma
Por supuesto seguir una dieta saludable es bueno para tu salud, pero no sólo consiste en eso, es necesaria la actividad física para lograr esas metas. Recomienda a tus pacientes hacer ejercicio por lo menos 30 minutos cada día, de igual forma recomienda acudir a un profesional que los instruya y sugiera ejercicios. Estirarse antes de cada sesión es importante también.
Remarcar las metas cada día, semana y mes
Es bueno preguntar a tu paciente cómo va en su proceso, esto con la intención de asegurarte que siga al pie de la letra las instrucciones y el plan que le has recomendado. En ocasiones ellos tienden a salirse del camino. Recordarles que tienen una meta por la cual están luchando para alcanzar los mantendrá concentrados en su objetivo y por consecuente, ellos lo alcanzarán eventualmente.
Un fracaso no quiere decir que la meta está perdida
Un mal momento, un tropiezo o fallar en algún aspecto del plan, siempre va a desilusionar al paciente y esto lo puede llevar a abandonar el objetivo de bajar de peso. Hacerles saber que nada esta perdido por haber cometido un pequeño tropiezo es muy importante para que no caigan en una actitud apática. Hazles sentir que estas para apoyarlos y darles ánimos.
Los pacientes tienden a tener diferentes actitudes, viven diferentes situaciones y los hábitos alimenticios son muy diferentes. Conoce a tu cliente a fondo antes de recomendar un plan alimenticio. Recuerda que mantenerlos con el ánimo bien en alto ayudará a que ellos logren su meta deseada.