A pesar de los avances de la medicina aun hoy en día es común padecer una enfermedad y no saberlo. Uno de los ejemplos más comunes es la presión alta. Por esto es importante prestarle atención a un dolor de cabeza que puede parecer inofensivo.
En muchos de los casos las personas se enteran por casualidad que padecen este mal.
La manera de detectarlo es fácil, pero asociarlo con el problema es cuestión es más complicado ¿por qué? Los nervios sin motivos, dolor de cabeza frecuente y hemorragias nasales consecutivas pueden significar que padeces de hipertensión declarada.
Cualquier órgano puede ser afectado, pero el sistema vascular es el que llevara más la carga por los excesos de presión en la sangre. La hipertensión es la principal causa de arterioesclerosis.
La persona que padece hipertensión, debe realizar un esfuerzo mayor casi cualquier cosa, por esto se genera que en las paredes que recubren su tamaño y por lo tanto se requiere más sangre para funcionar correctamente.
Si las arterias no pueden satisfacer esa demanda de sangre, la mayoría del los casos terminan en un infarto de miocardio.
Si los órganos de tu cuerpo se ven afectados se manifiesta de manera sutil la hipertensión: Los riñones empiezan a sufrir insuficiencia. Las arterias del cerebro, por otra parte, pueden producir hemorragias, dañando las retinas por los vasos que también se resiente.
Por último, se cree que se puede colapsar por la alteración de la circulación de sangre.
NO hagamos el cuento largo, la presión arterial alta alteran nuestra vida y la de nuestro entorno, por eso no podemos tomar a la ligera la función que desempeña.
Remedio natural
Para evitar todos estos males podemos recomendarte un remedo natural que te ayuda muchísimo si te han diagnosticado con presión alta.
Para prepararlo, vas a necesitar:
- Un trozo de jengibre rallado
- Un diente de ajo rallado
- Una cucharada de vinagre de sidra de manzana
- Una cucharadita de miel
- Una cucharada de jugo de limón
Preparación:
Licúa todos estos ingredientes y guárdalos refrigerados en un frasco con tapa hermética durante 5 días, al cabo de los cuales podrás empezar a consumirlo.
Consumo:
Debes tomar este remedio casero antes del desayuno y antes de la cena. Solo una cucharadita en cada toma, y ten en cuenta que no debes superar tres por día.
Notarás cambios importantes después de una semana de consumirlo que se notarán en tu energía y vitalidad.
Recuerda que en cuestiones de salud no existe verdad absoluta, así que además de esta receta no olvides cuidarte, hacer ejercicio, consumir poca sal y cosas por el estilo, de esta manera no te preocuparas por los efectos más negativos de la hipertensión y podrás vivir de manera saludable.